10 CONSEJOS PARA GANAR LA CONFIANZA DE SUS ALUMNOS. Obviamente el profesor no debe afrontar la educación como un concurso de popularidad. Sin embargo, los educadores eficaces conocen el valor de tener una buena relación personal con sus alumnos. Un ambiente escolar agradable disminuye los enfrentamientos, aumenta la participación del alumno y reduce los niveles de estrés de todos. Aprenda los medios para conseguir el apoyo de sus alumnos para un mejor desarrollo de sus clases:

1. Evalúese a usted mismo

Para que podamos causar un buen deseo por parte de los alumnos en ser respetados, debemos conocernos. La primera pregunta que debes hacer a ti mismo es: ¿quién soy yo? La respuesta a esta pregunta no es su nombre, sino lo que usted tiene como valores morales, como es su carácter. Creer: una vez estando frente a un aula, usted necesita creer en sí mismo. La forma en que usted camina, mira, se pone de pie, se viste, habla, actúa, e incluso huele, es lo que determinará lo que los alumnos pensarán a su respecto.

Por lo tanto, hay que sobresalir, huir del sentido común, e imponerse como persona que merece respeto.

2. Conozca a sus alumnos

Busque conocer a sus alumnos como individuos. Descubre sus intereses, conversando con ellos sobre deportes, televisión, internet, etc. Algunos profesores piden que en el primer día de clase los alumnos hagan una pequeña redacción sobre lo que les gusta y lo que no les gusta. Esto ayuda mucho, pues usted podrá utilizar este material para, en un momento dado de sus clases, hablar sobre el comentario que alguien hizo en su redacción. Cuando usted conversa con ellos y oye lo que tienen que decir, usted pasa a ser visto no sólo como un adulto, sino como alguien que está verdaderamente interesado en lo que piensan. Obviamente no debemos mostrar favoritismo, pero debemos procurar ser más cercanos a aquellos alumnos más problemáticos, al procurar elogiarlos con sinceridad incluso ante posturas consideradas simples, como decirle a él sin que los otros alumnos oigan: su cooperación me ayudó a enseñar hoy. ¡Gracias!

3. Proteja la autoestima de los alumnos

Si usted enseña, sobre todo adolescentes, sabe que son bastante inseguros. Quieren ser aceptados por sus colegas, y ser criticado por el profesor frente a ellos puede afectar su autoestima. Para no sentirse inferiores, a menudo responden en el mismo tono, pues hacen todo para preservar su posición ante los amigos.

Para lograr mantener la disciplina, lo ideal es actuar rápida y fácilmente. Trate de mantener la voz en un tono normal, sin gritar. No utilice sarcasmo. Si es posible llamar la atención de una manera divertida, haciendo un pequeño comentario inofensivo, mejor aún. A veces sólo el modo de mirar ya resuelve. Sin embargo, si el alumno se niega a obedecer, deje en claro que para todos es la misma «penalidad». De esta forma, se sentirá obligado a someterse la regla establecida en general.

4. Disfrute de los buenos días para crear un ambiente acogedor

Muchos profesores sólo interactúan con sus alumnos cuando hay problemas de disciplina. Recuerde elogiarlos también. Elogios como: «Me gusta enseñar en esta sala», «me ha gustado ver a todos ustedes aplicados, estudiando juntos», entre otros, hacen que usted crea un lazo de amistad con los alumnos.

5. Sea honesto

Al cometer un error, asuma y muestre su lado humano y como todo humano, puede tener fallas. Si usted está abierto a punto de admitir que se equivocó en algo, los estudiantes también se sentirán más a gusto para admitir sus propios errores.

6. Actue con justicia

Si un buen estudiante le pide que entregue un trabajo atrasado y acepte, también debe aceptar el trabajo atrasado de aquel alumno que es generalmente indisciplinado. Actuar con justicia no siempre es fácil, pero es preciso.

7. No confunda agrado con confianza

Los estudiantes pueden tener agrado de un profesor, sin embargo, no confiar en él, y viceversa. Trabaje para obtener la confianza de sus alumnos.

8. Comparta experiencias personales con los alumnos

Siempre hable sobre alguna experiencia personal, relacionada con el tema que está abordando, atrapa la atención de los alumnos, y les hace sentirse un poco más íntimos de usted.

9. Disciplina con eficiencia

Estipule sus reglas desde el comienzo de las clases, y tome precauciones si estas reglas se rompe. No hay como respetar a un profesor o confiar en él cuando no puede imponer orden en su aula.

10. Conviértete en un profesor popular

Cuando los alumnos les gusta un profesor, se esfuerzan más en su materia. Eso es un hecho. Al tratar a sus alumnos con el respeto con que le gustaría ser tratado, ofreciendo apoyo, sonriendo, y escuchando sus preocupaciones, eso le ayudará a ganar la confianza y amistad de sus alumnos.

Recuerde que la confianza no es algo dado: tiene que ser conquistada. Sin embargo, mantenga siempre la distancia profesional requerida. El hecho de ser demasiado amigo puede hacer que, al contrario de lo que se desee, los alumnos se comporten inadecuadamente. Aprender distinguir la estrecha línea entre ser un profesor amigable o un amigo que enseña, lo que no es conveniente.

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